El director de cine italiano Francesco Rosi, uno de los más aclamados del país, sobre todo por sus películas sobre el crimen organizado, ha muerto este sábado a los 92 años de edad en su domicilio de la capital italiana.
Los medios de comunicación locales han informado de que su muerte se produjo durante la noche de este sábado mientras dormía. Asimismo han señalado que en las últimas semanas se había visto obligado a guardar reposo aquejado de una bronquitis.