El joven director dominicano José María Cabral comienza una prometedora carrera en el cine con su película "Jaque Mate", ópera prima en la que mezcla el suspense, el humor y el compromiso social.
"Es una película súper divertida, con mucha intriga, y que se hizo con mucha pasión y todo el corazón", declaró hoy en una entrevista a Efe el cineasta dominicano, de 24 años sobre "Jaque Mate", que será presentada en el Festival Internacional de Cine Latino de Nueva York, del 13 al 19 de agosto.
En esta cinta, producida por Antena Latina Films, Cabral cuenta la historia de un presentador de televisión que, en pleno programa, es sorprendido por la llamada en directo de un secuestrador que le comunica que tiene a su mujer y a su hijo como rehenes, por misteriosas causas que el espectador irá descubriendo poco a poco.
"No es por un motivo económico, sino social y personal, y ése es el fuerte de esta película, que tiene mucho de thriller y un humor negro que viene dado por el juego que practica el secuestrador, un antagonista que atrae mucho al público porque les entretiene y les permite identificarse con él", explicó Cabral.
"Jaque Mate" se estrenó en abril en las salas de cine de República Dominicana, "con mucho éxito", según Cabral, quien, desde hace dos años, vive en Nueva York y estudió una temporada en Madrid.
El joven comenzó tomando clases de interpretación, pero, a los 16 años decidió cambiar de bando y situarse detrás de las cámaras, porque, ante todo, se considera "un contador de historias, y como actor, estás limitado a contar una sola, mientras que ser director ofrece muchísimas más posibilidades".
Cabral empezó a grabar cortometrajes con sus amigos, que proyectaba en casa, e invertía lo que recaudaban en nuevos proyectos y en alquilar salas de cine de su ciudad, Santo Domingo, para exhibir sus creaciones.
"Iba a los colegios y los empapelaba con póster, para anunciar que proyectábamos una película", recordó Cabral.
Finalmente, Antena Latina Films accedió a producir su proyecto más elaborado hasta la fecha, "Jaque Mate", que rodaron con un reducido presupuesto en tan sólo dieciséis días.
"Sólo fue posible realizar la película en ese tiempo récord porque todo el equipo entregó su pasión y se hizo con corazón", afirmó Cabral, que planea regresar en breve a su país para enfrascarse en un nuevo guión, que será "el más ambicioso" de todos los que ha escrito y en el que mezclará la ciencia ficción con los temas sociales.
El director apuntó que el cine no tiene por qué ser comprometido socialmente, pero que puede ayudar "a que se levanten voces entre los jóvenes, para que la sociedad civil vele en aquellos países en los que hay corrupción, y se mantenga vigilante, para que no se descontrole".
Señaló que a él le interesa particularmente abordar el tema de "la carencia de educación, ya que de allí nace la corrupción", y añadió que, en cualquier caso, el cine ha de ser "comprometido con uno mismo, con lo que quieres contar en cada momento".
Cabral subrayó que en Latinoamérica se está abriendo un mercado para una corriente de jóvenes cineastas "que tienen mucho que decir, de una forma diferente, y dejando constancia de su cultura latina".
"Va a ser un 'NeoHollywood', de manera que el foco cinematográfico no se concentre sólo en Los Ángeles, sino en muchas otras ciudades, con nuevas voces, que trabajen géneros y estilos distintos", pronosticó Cabral.
El joven director, por el momento, se propone seguir involucrado en el mundo del celuloide "durante los próximos quince años, por lo menos".
"Más allá no puedo comprometerme, no quiero casarme ni con el cine, pero pretendo dejar que me acompañe y que me lleve adonde sea, y quizás sea el amor por él lo que me haga aprender cosas nuevas, tener otras experiencias, y querer vivir mi propia película en lugar de rodarla", concluyó.
Fuente: http://www.laprensasa.com