Hay películas famosas y escenas famosas. Hace años, dediqué un artículo a las películas más famosas de la historia (uno de los más populares de este blog, por cierto) y hoy haré lo propio con las escenas más famosas: diez momentos cinematográficos inolvidables que conocen incluso aquellos que no han visto las obras que los incluyen. Diez fragmentos de cine que ya forman parte del imaginario colectivo.
10. El provocador cruce de piernas de Instinto básico (Paul Verhoeven, 1992). Sharon Stone saltó a la fama gracias a un erótico cara a cara con Michael Douglas en el que tanto él como los espectadores vimos mucho más de lo que esperábamos. Por cierto, la actriz afirma que accedió a rodar la escena sin ropa interior confiando en que la cámara respetaría más su intimidad…
Joe E. Brown y Jack Lemmon en Con faldas y a lo loco |
9. La irrisoria revelación final de Con faldas y a lo loco (Billy Wilder, 1959). Que esta película sea a menudo considerada como la mejor comedia de todos los tiempos se debe en gran medida a la divertidísima conclusión. Tras despedirnos de Marilyn Monroe y Tony Curtis, encontramos uno de los diálogos más genialmente sorprendentes de la historia del cine: ¿qué responde Joe E. Brown al “Soy un hombre” de Jack Lemmon? “Nadie es perfecto”, por supuesto. Aunque, en este caso, los dos intérpretes y el director lo son.
King Kong en King Kong |
8. Subiendo al Empire State Building en King Kong (Merian C. Cooper y Ernest B. Schoedsack, 1933). Además de marcar un antes y un después en el cine de efectos especiales, esta mítica película posee uno de los finales más famosos de la historia del cine debido a la unión de espectacularidad y sentimientos enfrentados (¿quién es el monstruo, después de todo?). El mediocre remake de 1976 dirigido por John Guillermin cambió el icónico edificio por las Torres Gemelas, pero la grandilocuente versión de Peter Jackson del 2005 regresó a la localización original. Por supuesto, ninguna superó el impacto original.
Humphrey Bogart e Ingrid Bergman en Casablanca |
7. La nostálgica despedida de Casablanca (Michael Curtiz, 1942). Tras embelesar a los espectadores a lo largo de la película, el famoso romance entre Humphrey Bogart e Ingrid Bergman llegó a su fin de un modo tan desgarrador como hermosamente perfecto. Empero, hay lugar para la esperanza: “Siempre nos quedará París”. Por cierto, pese a partir de una obra de teatro, el oscarizado guion era (re)escrito día a día antes del rodaje, con lo que nadie conocía el desenlace cuando la filmación dio comienzo.
Viggo Mortensen, Sean Astin, Ian McKellen, Elijah Wood, Dominic Monaghan, Orlando Bloom, Billy Boid, John Rhys-Davis y Sean Bean en La comunidad del anillo |
Marilyn Monroe y Tom Evell en La tentación vive arriba |
5. El vestido ondeando al viento en La tentación vive arriba (Billy Wilder, 1955). Aunque esta simpática película no es especialmente memorable, este momento fue clave en el afianzamiento de Marilyn Monroe como icono del siglo XX. Todo gracias a la maravillosa combinación de fresca sensualidad y frágil ternura que destilaba la estrella. Eso sí, la escena le costó su relación con el jugador de béisbol Joe DiMaggio, quien no pudo soportar contemplar el juguetón rodaje de la misma en directo.
Gene Kelly en Cantando bajo la lluvia |
4. El baile lluviosamente feliz de Cantando bajo la lluvia (Stanley Donen y Gene Kelly, 1952). Estar resfriado no impidió a Gene Kelly protagonizar el momento musical más brillante y conocido de la historia. Y todo ello con una sencillez de la que tienen mucho que aprender los musicales actuales. Curiosamente, la escena no estaba en el guion original, en el que la canción era interpretada por los tres protagonistas (Debbie Reynold, Donald O’Connor y el propio Kelly). Por cierto, la lluvia se formó con una solución salina mezclada con leche para lograr mejor efecto en pantalla.
Leonardo DiCaprio y Kate Winslet en Titanic |
2. Amor en la proa del Titanic (James Cameron, 1997). Difícilmente se habría convertido esta oscarizada película en la más taquillera de la historia si el público no se hubiera identificado tanto con la deliciosa pareja protagonista. Clave de ello es este bellísimo momento, retomado por la comedia romántica Love actually (Richard Curtis, 2003). “¡Estoy volando!” grita una emocionada Kate Winslet bien sujetada por un seductor Leonardo DiCaprio. Y, al ritmo de la maravillosa banda sonora de James Horner, nosotros volamos con ellos.
Janet Leigh en Psicosis |