Primero hará con Tom Hanks el thriller de la Guerra Fría escrito por los hermanos Coen y, sólo seis meses después, se estrenará su adaptación de ‘El gran gigante bonachón’.
Desde que decidió posponer de forma indeterminada Robopocalypse, Steven Spielberg ha estado coqueteando con varios proyectos. Incluso llego a abandonar otro, American Sniper, que fue a parar a manos de Clint Eastwood. Para un cineasta tan hiperactivo y rápido como él, los dos años que han pasado desde Lincoln parecen un montón de tiempo sin ponerse detrás de la cámara, pero esa situación va a cambiar pronto. Igual que en anteriores ocasiones cuando ha tenido un hiato más largo de lo habitual entre películas, Spielberg va a enlazar sus dos próximos proyectos con apenas seis meses de distancia en las respectivas fechas de estreno.